SANTIAGO HERNÁNDEZ LEÓN. Decano de Ciencias del Mar

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Entrevistamos a

21 Jul 2008

SANTIAGO HERNÁNDEZ LEÓN. Decano de Ciencias del Mar

santiago_hernndez.jpg“En Ciencias del Mar ya tenemos tres máster funcionando en el sistema europeo y dos programas de doctorado de calidad”

“En Ciencias del Mar ya tenemos tres master funcionando en el sistema europeo y dos programas de doctorado de calidad”

 

santiago_hernndez.jpg1. ¿Cuáles cree que son las ventajas que aportará el nuevo Espacio Europeo de Educación Superior?

Sin duda, se implantará un sistema donde lo importante no será el cúmulo de conocimientos sino el desarrollo de conceptos y habilidades. En la actualidad, el estudiante acumula una cierta cantidad de conocimientos al final del cuatrimestre, los vomita en un examen, se olvida de ellos y se prepara para el siguiente examen. Este sistema beneficia a aquellos estudiantes con una buena memoria y aunque puedan sacar buenas calificaciones, la experiencia es que no son los más capacitados para el mundo real. El sistema europeo tendrá la ventaja (si se hace bien) de educar a los estudiantes en la gestión de conocimientos, el trabajo, el desarrollo de las habilidades que le permitan el desarrollo de ideas, procedimientos y la resolución de problemas. Al contrario que en el pasado, en el siglo XXI la información no es el factor limitante. Lo importante será gestionar bien esa información y saber encontrar las soluciones pertinentes. No es fácil realizar este cambio. Se puede caer en titular alumnos que no tengan ni conocimientos, ni habilidades.

 

2. ¿Ve algún inconveniente al proceso de convergencia?

La burocracia. Europa es el reino de los burócratas y sin duda se ha creado una nueva clase social. Existe una tendencia en crear instituciones de control que han demostrado que sirven para muy poco. Estas agencias terminan siendo monstruos burocráticos que en ocasiones rozan el esperpento. Además, la burocracia tiende a perpetuarse y reproducirse con la consiguiente dilapidación de dinero, recursos y esfuerzo. Habría que preguntarse cuál es el presupuesto de estas instituciones y su incidencia sobre la calidad universitaria. También es notorio el incremento del trabajo burocrático de profesores y decanos. Hay que justificar la existencia de la mencionada clase burocrática. La calidad de la enseñanza está altamente relacionada con los recursos disponibles. Si se dispone de las infraestructuras adecuadas, los estudiantes podrán aprender los procedimientos más innovadores y vanguardistas, haciéndoles competentes y competitivos para afrontar el mundo del trabajo. Es aquí donde Europa sigue fallando. Pone el énfasis en los procedimientos burocráticos y no en los recursos. La única forma de emprender este cambio es hacer que los presupuestos con los que se alimentan las Facultades provengan de la investigación a través de los costes generales (overheads). Aquellos centros que sean capaces de atraer a los mejores investigadores dispondrán de más recursos para la docencia y de los profesores más competitivos. Aquellas facultades que sean más competitivas en investigación, lo serán también en la docencia. Esto no se quiere entender en nuestro país.

 

3. En relación con la titulación que se imparte en su centro, ¿cómo se contempla el proceso?

Con cierto escepticismo pues nos da la impresión de que todo el tremendo papeleo burocrático que vamos a generar en los próximos años no va a servir para nada. Tenemos la experiencia del libro blanco, de obligada elaboración en su momento y que posteriormente no sirvió para nada, sólo como un ejercicio interesante según nos dijeron. Una vergüenza. Una parte importante de la Universidad está convencida que va a ocurrir lo mismo en el futuro, mientras que los problemas de recursos docentes, infraestructuras, profesorado poco o nada motivado,… seguirán ahí. Eso sí, veremos crecer la burocracia (y sus sueldos) a nuestro alrededor.

 

4. ¿Qué cambios fundamentales tendrá que realizar su Centro para la adaptación?

La Facultad de Ciencias del Mar tendrá que adaptar su plan de estudios en los próximos meses y no cabe duda que, una vez más, será un ejercicio al menos delicado. No se vislumbran grandes cambios pues una parte importante del profesorado desde hace mucho ya ha impartido su docencia con un matiz europeo (clases prácticas, trabajos tutorizados, trabajos en grupo, de investigación,…). Además nuestros estudiantes disponen ya de tres máster oficiales en ciencias marinas (oceanografía, acuicultura y gestión ambiental), así como de doctorados con la mención de calidad por parte del Ministerio de Educación y Ciencia. El cambio fundamental que tendría que experimentar la Universidad para promocionar su Facultad de Ciencias del Mar es que los recursos que generan sus profesores pudiesen revertir sobre la docencia y eso no pensamos que ocurra en un futuro próximo.

 

5. ¿Considera que el alumnado de su centro se adaptará con facilidad al nuevo proceso de enseñanza/aprendizaje que exige un mayor trabajo individual?

Este sistema implica trabajar un promedio de ocho horas diarias como cualquier trabajador y esa cultura del trabajo la tienen escasamente desarrollada. La secundaria no hace nada por dicha cultura y el bachillerato lo que hace es sólo entrenar la memoria de los alumnos para vomitar una serie de conocimientos en la Prueba de Acceso a la Universidad. Por tanto, poca cultura para desarrollar otros procedimientos, para desarrollar habilidades.

 

6. Hasta el momento ¿cuáles considera que son las fortalezas de la titulación que imparten?

La Facultad de Ciencias del Mar de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria es el centro, dentro de este ámbito, de mayor prestigio en nuestro país. Nuestra Facultad se sitúa entre las diez primeras instituciones del país (docentes y de investigación) en producción científica y entre las primeras de las estrictamente universitarias. Nuestros profesores poseen un nivel docente e investigador importante y nuestros licenciados ocupan puestos de responsabilidad en numerosas instituciones y empresas, gozando de prestigio debido a la formación que reciben tanto de teoría como de prácticas. El tener tres máster funcionando en el sistema europeo y dos programas de doctorado de calidad no cabe duda que constituyen una fortaleza.

 

7. ¿Y cuáles las debilidades?

La Facultad de Ciencias del Mar de la ULPGC es el centro de referencia de nuestra Universidad. En los foros universitarios nacionales, los alumnos de bachillerato cuando preguntan por nuestra Universidad, en su mayoría lo hacen por nuestros estudios. Sin embargo, esa situación de referencia no se traduce en políticas de incentivo. Nuestra debilidad es, sin duda, el habernos condenado a tener nuestra sede lejos de la zona costera debido a una incomprensible política por parte de los sucesivos rectorados. Desafortunadamente, la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria decidió en su momento ubicarnos en el monte y cuando el Cabildo Insular de Gran Canaria nos cedió unos terrenos en la zona costera, nuestra institución decidió dedicar dichos terrenos a otros usos sin contar con la Facultad, perjudicando seriamente sus aspiraciones de mejora y comprometiendo seriamente el futuro de nuestro profesorado y el de generaciones de alumnos.

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